Han quemado Dragon Ball Z, lo han dejado hecho cenizas, reduciendo el valor de la franquicia a niveles blasfemos. Aún recuerdo los tiempos en los que el anuncio de un nuevo juego de Goku suponía todo un acontecimiento, una noticia emocionante. Eso cambió progresivamente a partir de PlayStation 2.
El lanzamiento de Dragon Ball Z Budokai fue bien acogido, pero luego llegaron Budokai 2 y Budokai 3 para perfeccionar la fórmula. Se cambió ligeramente el sistema de combate para Budokai Tenkaichi ya éste le siguieron Budokai Tenkaichi 2 y Budokai Tenakaichi 3. Las “versiones especiales” de algunos de estos juegos o el innecesario Dragon Ball: Infinite World ya dejaban claro que Namco Bandai no se iba a molestar en disimular su estrategia “sacacuartos”. Aquí habría que mencionar también los dos Shin Budokai de PSP.
El cambio de generación no ayudó en absoluto a la franquicia. Es verdad que no se han lanzado tantos juegos como en las consolas anteriores (al menos de momento), pero también es cierto que se ha innovado más bien poco. El primero de la tanda fue Burst Limit, nada del otro mundo. Después llegaron Raging Blast y Raging Blast 2, dos juegos que a mí, que era un fanático de Goku, no me han despertado el más mínimo interés.
Pero, ¿por qué hablo así? Pues porque ya hay nuevo DBZ en camino. Se llama provisionalmente Dragon Ball Game Project Age 2011 (acabará siendo Raging Blast 3),saldrá este mismo año (si es que no me equivoco interpretando las señales), ya tiene página web oficial y, según puede verse en las capturas del juego (que son las de la imagen de abajo)… ¡será exactamente igual que los diez anteriores!
No hay comentarios:
Publicar un comentario